15 mayo 2011

El éxito granota es el éxito del humilde


La suerte le tenía reservado un guiño a la sinuosa historia levantinista, tan acostumbrada a enfrentar curvas sin frenos. Anticipándose al epílogo liguero ha conseguido esta vez llegar a la meta antes de que acabe la carrera, y le ha sobrado una jornada. El desafío era demasiado exigente, con un presupuesto de sólo 8,5 millones de euros tenía que cuadrar demasiado el círculo y además reducir la deuda, porque no olvidemos que el Levante está sumergido en ley concursal de acreedores. El mago de la lámpara es Luís García Plaza, un motivador excelso que ha conseguido un rendimiento top de una plantilla sobrada de voluntad y escasa de estrellas. Para que  el proceso desintoxicador de deuda se consolidara era necesario que el sueño de primera continuase al menos una temporada más, y además para alegría levantinista, se ha conseguido en el feudo del eterno rival.