C.Valldecabres
Fulminado. Emiliano Carballo, hijo, ha pasado a ingresar las abultadas listas del INEM. Los administradores judiciales cortaron por lo sano después de varios días tratando de solventar el asunto y, por eso, Mariano Durán comunicó ayer a José María Medina, abogado toledano del ya ex director general azulgrana, que Carballo había sido destituido. De esta manera tan contundente se da carpetazo a uno de los episodios que tenía un final anunciado desde hace muchísimas fechas, porque a López Lara no le supuso ningún tipo de rubor dejar claro que Emiliano Carballo -hijo de una de las personas más vinculadas al grupo de Tomelloso-, no reunía el perfil deseado para esta función.
Y a los auditores tampoco les parecía bien depositar su confianza en Carballo, persona que aterrizó en el club de la mano de Pedro Villarroel y cuya función hasta su reciente designnación como director general era la de ocupar la plaza de gerente en la Fundación. La decisión de sustituir a Carballo por Quico Catalán -que hoy será presentado de manera oficial- se tomó hace ya varios días pero en todo este tiempo no se habían puesto de acuerdo a la hora de cerrar la liquidación, porque como empleado no tenía blindado su contrato, matiz que sí tenían Antonio Hervás y Julio Romero y que sí tiene Manolo Salvador. «No lo conocemos y había que buscar una solución, no podíamos estar más tiempo así», se justificaba uno de los auditores.
La notificación no le pudo haber pillado a Emiliano en peor momento. Desde el domingo está afectado de un virus que le obligó a pasarse ayer varias horas en urgencias de una clínica de Manzanares, donde se encontraba. Y como a rey muerto, rey puesto, esta tarde (19.30 horas) llega la hora de Quico Catalán, un hombre que conoce muy bien los entresijos de la entidad azulgrana y que se apunta como personaje que cuenta con el beneplácito del Ayuntamiento de Valencia que, al fin y al cabo, tiene la llave de la salvación levantinista. Catalán aterriza con plenos poderes pero lógicamente siempre sujeto a la última voluntad judicial, que hoy dará las oportunas explicaciones para justificar este cambio de piezas.
Una de las primeras intervenciones de Catalán será la de afrontar las renovaciones de los jugadores condicionadas a las restricciones económicas.
La jornada de este martes puede deparar mucho más jugo. LA intención de la administración concursal es la de darle otro empujón a ese deseo de lograr la cesión para la autocartera de las acciones que posee Jesús Serna y que maneja José Antonio López Lara. El borrador definitivo para darle salida a esta inusual operación está costando más de lo esperado por los auditores que, de forma paralela, mantienen otro frente abierto: el de Pedro Villarroel. El retraso les está provocando cierto malestar aunque no ocultan su intención de ir quemando etapas de esta larga travesía que espera a la sociedad.
Y a los auditores tampoco les parecía bien depositar su confianza en Carballo, persona que aterrizó en el club de la mano de Pedro Villarroel y cuya función hasta su reciente designnación como director general era la de ocupar la plaza de gerente en la Fundación. La decisión de sustituir a Carballo por Quico Catalán -que hoy será presentado de manera oficial- se tomó hace ya varios días pero en todo este tiempo no se habían puesto de acuerdo a la hora de cerrar la liquidación, porque como empleado no tenía blindado su contrato, matiz que sí tenían Antonio Hervás y Julio Romero y que sí tiene Manolo Salvador. «No lo conocemos y había que buscar una solución, no podíamos estar más tiempo así», se justificaba uno de los auditores.
La notificación no le pudo haber pillado a Emiliano en peor momento. Desde el domingo está afectado de un virus que le obligó a pasarse ayer varias horas en urgencias de una clínica de Manzanares, donde se encontraba. Y como a rey muerto, rey puesto, esta tarde (19.30 horas) llega la hora de Quico Catalán, un hombre que conoce muy bien los entresijos de la entidad azulgrana y que se apunta como personaje que cuenta con el beneplácito del Ayuntamiento de Valencia que, al fin y al cabo, tiene la llave de la salvación levantinista. Catalán aterriza con plenos poderes pero lógicamente siempre sujeto a la última voluntad judicial, que hoy dará las oportunas explicaciones para justificar este cambio de piezas.
Una de las primeras intervenciones de Catalán será la de afrontar las renovaciones de los jugadores condicionadas a las restricciones económicas.
La jornada de este martes puede deparar mucho más jugo. LA intención de la administración concursal es la de darle otro empujón a ese deseo de lograr la cesión para la autocartera de las acciones que posee Jesús Serna y que maneja José Antonio López Lara. El borrador definitivo para darle salida a esta inusual operación está costando más de lo esperado por los auditores que, de forma paralela, mantienen otro frente abierto: el de Pedro Villarroel. El retraso les está provocando cierto malestar aunque no ocultan su intención de ir quemando etapas de esta larga travesía que espera a la sociedad.
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